Este es un mes que nos pondrá a trabajar con nuestras emociones, el desapego, servir y ayudar…

Es un tiempo para gestionar todos los asuntos relacionados con la familia, los amigos o con las personas, que se encuentren en tu círculo más cercano. Usa esta energía para servir a otros, ayudar, dar afecto, cariño y amor a tus seres queridos. Es tiempo para tomar conciencia del respeto por nosotros mismos y por la vida, dejando de lado los complejos y el temor al rechazo, tomando decisiones que nos llevan a hacernos responsables de nuestra propia vida, cortando con las dependencias.

Recordemos liberar nuestra sombra y dejemos de responsabilizar de todo lo que nos sucede a la pareja, familia, trabajo, jefe, país, entre otras cosas. Superando así, el miedo que bloquea y paraliza, a la hora de tomar una decisión, somos los únicos creadores de nuestra realidad, responsabilizarnos de ello, es libertad.

En este mes las lecciones de apego y desapego estarán a la orden del día, así que pon especial atención a tus cariños (familia, amigos, relaciones, trabajo, dinero, etc.) ya que, la lección a aprender está en las áreas de tu vida que más valores o ames… identifica cuales son las tuyas, pues podrían verse afectadas.

Es un momento de gran sensibilidad emocional y necesidad de afecto. Lo más probable, será que las responsabilidades familiares aumenten y la permanencia más en casa atendiendo a tu familia o asuntos familiares podría presentarse más de lo habitual. Es un buen mes para introducir mejoras y cambios en tu lugar de trabajo o en el hogar, buscando equilibrio e integrando ambas partes de tu vida, la emocional y la profesional.

En este mes vibra el Amor, nos enseña y muestra que el primer amor, el más importante, es el amor a nosotros mismos. Nos sentiremos muy en contacto con nuestros anhelos más profundos, con nuestro ideal de vida, aprovéchalo para visualizarte y dar o seguir dando los pasos adecuados hacia la vida que deseas para ti.

¡Feliz mes de septiembre!